Cómo hacer una funda para tu móvil

¿Os acordáis del bolsito que tejí para mi madre? Pues con los hilos que sobraron se me ocurrió hacer una funda para el móvil y este fue el resultado.

¿No está mal, no?

Hacerla es muuuuuuy fácil. Seguí las instrucciones del tutorial de Bluü y para añadir un toque más personalizado hice lo siguiente:

– Cambié de color y tejí siete vueltas más de puntos rasos para conseguir el dobladillo de la entrada de la funda.

Añadí un hilo en la vuelta de cambio de color (justo donde se dobla la funda) y anudé un par de pompones en las puntas del hilo. Así se logra un cordón corredizo que le da un toque diferente a la funda. Hacer los pompones es sencillo, aunque al ser tan pequeños es un trabajo de chinos. Son los primeros pompones de este estilo que hago y para aprender a hacerlos seguí estas sencillas instrucciones.

¿A que parece fácil de hacer? Pues anímate porque cuando te pongas manos a la obra verás que en realidad es tan fácil como parece. Aunque si eres de las que te da pereza el ganchillo o se te enredan los hilos, siempre puedes pedir tu funda en nuestra tienda 😉

Regalo para el día del padre: ¡Una corbata!

Ayer, día del padre, se nos ocurrió darle las gracias a nuestro papá por ser tan bueno con un pastel sin gluten y sin azúcar (quedó buenísimo), y con una corbata… ¡de ganchillo!

Es una labor muy sencilla de tejer, pues solo hay que seguir las líneas sin estar atenta a los aumentos, aunque reconozco que a veces resulta un poco pesado por su monotonía. Además, seguimos el patrón de Ohvillo pero con modificaciones, ya que usamos un hilo muy fino y si seguíamos al pie de la letra el patrón, la corbata nos quedaba muy estrecha.

Usamos dos ovillos de lana 100% acrílica, porque ya se sabe que las corbatas suelen mancharse de vino y luego hay que lavarlas 😉 Combinamos dos colores perlados, uno gris azulado y otro blanco, y el grosor del hilo era tan fino que tuvimos que tejerlo con un ganchillo del 4 (¡aunque en la etiqueta recomendaban el del 2!). Finalmente modificamos el patrón de Ohvillo de la siguiente manera:

– 11 cadenetas.

– 9 puntos bajos empezando en la tercera cadeneta a la izquierda del ganchillo.

– Girar + 1 cadeneta + 9 puntos bajos empezando en el tercer punto a la izquierda del ganchillo.

– Repetir hasta conseguir los 91 cm de largo.

– 1 cadeneta + 1 aumento en el tercer punto de la izquierda del ganchillo + 7 puntos bajos + 1 aumento (11 puntos en total)

– Girar + 1 cadeneta + 1 aumento en el tercer punto de la izquiera del ganchillo + 9 puntos bajos + 1 aumento (13 puntos en total)

– Girar + 1 cadeneta + 13 puntos bajos empezando en el tercer punto a la izquierda del ganchillo.

– Repetir hasta los 20 cm de largo y tejer dos lineas de color blanco.

– Continuar con el color gris y volver a cambiar al blanco a los 6 cm de largo.

– Repetir dos veces y acabar tejiendo con el color gris hasta conseguir una largada total de la corbata de 132 cm.

Para conseguir un final triangulado, lo que hicimos fue seguir el consejo del patrón de Ohvillo: Coser las puntas de la parte final de la corbata. Al principio intenté darle la forma triangular con unas cuantas disminuciones, pero creemos que el resultado final es mucho mejor si se cosen las puntas.

Tejer con un hilo tan fino no es sencillo y aún menos cuando incluyen cambios de color como el blanco (los puntos son más difíciles de ver en colores claros), pero el resultado no está nada mal y, personalmente, nos gustan los colores claros.

¿Y vosotr@s, también hicisteis algún regalo hecho a mano para el día del padre?

Gorro Arco Iris

Yo tenía un gorrito que me ayudó a mantener mis orejas y cabeza bien calentitas durante el camino hacia el campo base del Annapurna. Después de esa experiencia en Nepal, no lo necesité más, pero me hizo un servicio tan bueno durante esos diez días de caminata que decidí que me acompañaría aunque no lo necesitara. Lo até a un bolsillo de mi mochila y ahí se quedó, hasta que un mal día, en India, lo olvidé colgado en la puerta de un hostal. He olvidado muchas cosas en los hostales y ese gorro es una de las que más me dolió perder, sobre todo cuando lo volví a necesitar en Ladakh.

El desaparecido y la despistada.

Aunque no soy mucho de llevar gorros y no suelo ponermelos para pasear por la ciudad, sí que me gusta llevar uno puesto cuando voy por la montaña o las temperaturas son considerablemente frías, pues llevar la cabeza abrigada cuando ahí fuera está nevando es esencial para que no agarre un resfriado. Por ello, a falta del gorrito nepalí, decidí hacerme un gorro para no pasar frío por el Pirineo catalán durante las vacaciones de Navidad. Además aprendería un nuevo punto y, por primera vez, utilizaría el ganchillo para crear algo para mí. Así es como nació este gorro multicolor.

Ya no lloro por las noches recordando a mi gorro nepalí. Los colores y el tacto de este nuevo gorrito son tan bonitos que una no puede dejar de sentirse un poco más alegre cuando se mira en el espejo con él puesto. Es cómodo, bonito, suave y está hecho a mano por una misma. ¿Qué más se puede pedir?

Para crear este gorrito seguí este tutorial. Aunque está en inglés, es un punto muy fácil y, con un poco de atención, se puede aprender a hacerlo sin ni siquiera entender inglés. La verdad es que hacer este gorro no tiene mucho misterio. No hay disminuciones, ni aumentos ni puntos complicados. A buen ritmo y con una lana para ganchillo del 5 o 6, este gorrito está listo en poco más de 4 horas. Pero si aún no te animas a hacerlo tu misma, puedes encargarlo aquí. ¡Aprovecha ahora que estamos de rebajas! Además, tengo muchas ganas de hacer más gorros y estaré la mar de contenta de hacer uno para ti.

Tengo una hermana guapísima y el gorro le queda mucho mejor. ¡Pero pobre de ella que me lo quite!

 

Ya está aquí la tienda Amànima

Después de estos meses de experimentación y creaciones, hemos decidio empezar una tienda online para ofrecer nuestros productos. Queremos que Amànima se convierta en nuestra marca, en la esencia de aquello en lo que creemos y a lo que nuestras manos dan vida. Lo mejor de emprender a través de nuestras manos es que todo depende de nosotras. Con un pequeño paso y mucho esfuerzo podemos cambiar nuestra realidad, dejando de esperar para hacer nuestros sueños realidad. No será fácil, pero lo que realmente importa es todo lo que aprenderemos por el camino. Ya tenemos Blog, Facebook, Twitter y Pinterest. Y ahora, hemos dado un paso adelante para abrir nuestra tienda: Amànima. Creemos que es el momento para empezar nuestro propio camino, sin frenos, dejando fluir nuestras ilusiones para ver a dónde nos llevan.

En la tienda encontrareis todo lo que hemos hecho con nuestras manos hasta el momento. Algunas cosas ya os las hemos enseñado por aquí, como por ejemplo los búhos, las pulseras y los cupcakes. Otras, sin embargo, aún no hemos tenido tiempo de mostrarlas con detalle, pero hemos decidido ponerlas en el escaparate para no haceros perder el tiempo. Aunque lo más importante es que abrimos nuestra tienda de la mejor manera: ¡Con ilusión y rebajas! Durante estos tres primeros meses todas nuestras creaciones estarán disponibles con un 15% de descuento, incluídas las novedades que vendrán (si es que nos da tiempo a acabarlas antes de marzo…).

En fin, eso es todo lo que teníamos que anunciaros. Poco a poco y pasito a pasito os iremos informando de más novedades, proyectos y cosas bonitas que nos traemos entre manos. De momento os dejamos las puertas abiertas de Amànima para que entréis y echéis un vistazo. ¡Entrad, entrad, que afuera hace frío!